06 diciembre, 2010

Crema de Zapallo


Si algo abunda en esta época por estos lados es el zapallo. En todas sus formas, en todos sus colores y en diferentes sabores, la calabaza es por lejos la hortaliza favorita desde octubre, cuando las vemos mutiladas en su carne para formar parte de la decoración de Hallowen; hasta su presencia en los platos típicos de Thanskgiving. Así que, para ponerme en onda con esto de las pumpkins, me voy esta vez por una exquisita crema de zapallo. La particularidad; el zapallo va cocinado en el horno y no en agua; el resultado, extraordinariamente bueno.
Crema de Zapallo

1 Zapallo (de ese con forma de pera) partido por la mitad
aceite de oliva
estragón
semillas de cilantro
merquén
sal

pimienta de molinillo
1 taza de leche descremada apróx.
1 1/2 taza de caldo de verduras apróx.
  1. Precalienta el horno a temperatura media-alta. En una lata de horno pon las mitades de zapallo y espolvorealas con sal, pimienta, merquén, estragón y semillas de cilantro molidas con el mortero (si no las tienes, no es como para que dejes de hacer la sopa). Rocíalas con un buen chorro de aceite de oliva y mételas en el horno por media hora o hasta que el zapallo esté cocido.
  2. Separa la comida de la cáscara, métela a la juguera junto con un poco de la leche y caldo. Préndela y aprieta el botón hasta que esté todo integrado. Sugiero ir de a poco; la cantidad de líquido va a depender de la textura que quieras darle a la crema. Corrige la sal y la pimienta y adiós frío...igual se puede hacer en verano.

03 diciembre, 2010

Desclasificando ''Thanksgiving Day''

Su traducción literal es "Día de Acción de Gracias". La historia dice que el cuarto jueves de noviembre, en Estados Unidos y Canadá se recuerda el primer día de Acción de Gracias, donde los peregrinos ingleses agradecieron a Dios por haber pasado invictos el crudo inverno de Nueva Inglaterra.
Hoy, se conserva como la fecha favorita para reunirse con la familia y, alrededor de una abundante mesa, reflexionar acerca de eso que los hace sentir agradecidos...
Quiero detenerme en la parte de abundante mesa. Para aclarar dudas, una mesa promedio ese día sostiene: 1 pavo entero, cocinado según la tradición familiar; algún plato hecho con calabaza, hortaliza favorita del festival de la cosecha; salsa de cranberries para acompañar el pavo; puré de papas rústicos; algún acompañamiento hecho de papa dulce, entre otras preparaciones en extremo nutritivas.
En vista de tanta jarana por parte del local, algunos chilenos no quisimos dejar pasar notable ocasión para poner a prueba nuestro sudamericano paladar y con el mejor de los entusiasmos preparamos un almuerzo de acción de gracias.
Esta vez, mi participación fue un poco desacorde a la ocasión (Si, nos toco llevar postre y llegué con tres leches). En fin... los más entusiastas aportaron con una receta de un exquisito pan tradicional, un budín de papa dulce con una superficie de marshmallow grillada (No, no es postre), salsa de cranberries y puré de papas; y por supuesto, el infaltable pavo. La tradición sureña dice que el pavo debe freírse en una olla especial para ese menester, a una temperatura de 320 F , durante 45 minutos. Además se debe seguir muy aplicadamente las indicaciones previas respecto a descongelamiento, limpieza, secado y otros detalles cruciales para el éxito del plato.
Por otro lado, diarios y noticieros de la T.V advertían los peligros asociados a la tradición como incendios, accidentados y encuentros familiares que terminaban en funeral.
No muy amiga de la fritura, mis preferencias se inclinaban por el pavo al horno, pero en vista del entusiasmo de los comensales por el evento que significaría freír tamaño animal, me guarde mis comentarios.
Así, en un maravilloso día soleado, empezó el almuerzo. Las mujeres conversábamos y los hombres, esta vez cambiaron la parrilla por la piscina de aceite hirviendo. Pasado los 45 minutos, que muy atentamente respetó el dueño de casa, el pavo estaba listo. Sorpresa fue cuando vi una extraordinaria costra dorada que vestía a una muy tierna carne de pavo que, contra mis pronósticos, no estaba para nada aceitosa! Un éxito!!! Debo admitir que es el pavo más rico que he comido. Y que el mérito esta vez es del dueño de casa (lo siento otros hombres que estaban alrededor de la olla) que al más puro estilo gringo, hizo el honor de cortar generosas porciones para los invitados.
Para algunos es el banquete más esperado del año, para otros será el día anterior al Black Friday y compras a precios tan bajos que provocan la pérdida de la compostura. Por mi parte, thanksgiving fue un buen momento para dar las gracias por las amigos que generosamente nos han acogido durante este año y también el comienzo de una larga espera para el próximo pavo frito.
El dibujo del pavo es de Constanza Hurtado; artista chilena que vive en Atlanta y que en un par de minutos consiguió la perfecta decoración para la ocasión.

09 noviembre, 2010

Champinon Ostra al Ajillo

Terapia Culinaria, se luce hoy con un invitado especial.
Bueno para comer, también para cocinar. Rodrigo se luce con una receta que se la trajo de España y que nos recuerda lo bueno que es el ajo...
Champinon Ostra al Ajillo
  • 1 bandeja de champinones ostra, limpios, sin el tallo y cortados gruesos
  • 3 dientes de ajo picados fino
  • 1 manojo de cilantro picado fino
  • 1/2 taza de vino blanco
  • 1 cdta. de mantequilla
  • sal y pimienta en grano

Calienta un sartén a fuego alto, agrega aceite de oliva y saltea los champinones, cuando veas que tienen un ligero color tostado, baja el fuego a medio y agrega el ajo.

Cocina unos segundos, pon el vino blanco, pimienta y sal. Lleva los champinones a un extremo del sartén y deja que los jugos corran hacia el otro, agrega a los jugos la cucharadita de mantequilla, sube el fuego y espera a que se reduzca un poco el vino.

Échale el cilantro, revuelve, apaga y sirve inmediatamente acompanado del mejor pan con migas que encuentres.

27 octubre, 2010

Sopa Reversible de Apio

Frente a lo raro del clima de hoy en Atlanta; caluroso y húmedo, lluvioso y gris, hice para el almuerzo una sopa de apio. Calentita pero fresca, llenadora pero baja en calorías, fácil pero rica. Lo bueno, es que además se puede comer fría, tipo gazpacho. Excelente para el aperitivo de verano. Osea 100% reversible.
La idea, con algunas cambios y modificaciones, es de unas chefs que le cocinan a Jennifer Aniston.
Sopa de Apio
1 mata de apio
1/2 perejil
1 taza de arvejas congeladas
1/2 cebolla cortada en plumas
1 puerro entero
3 1/2 tazas de caldo de pollo o de verduras
1/2 cdta. de merquén
1 cda. de aceite de oliva
sal y pimienta en grano
En una olla pon una cucharda de aceite de oliva, llévala a fuego medio, cuando esté caliente pon los puerros picados en rodajas, la media cebolla cortada en pluma, sal, pimienta y merquén. Revuelve, baja el fuego y cocina para que suelten el olor. Preocúpate que no se doren.

Cuando estén listas, pon el caldo, tápala y cocinala por 10 minutos. Mientras, con un pela papas, sácale los nervios al apio, también las hojas pero deja un par. Corta las varas en 3. Aprovecha de limpiar la cocina en estos minutos que te sobran.

Pasado el tiempo, pon la taza de arvejas congeladas (así, congeladas) y el apio con las hojas que dejaste también. Tapa de nuevo y espera unos 15 minutos o hasta que el apio esté blando.

Pon la sopa en la juguera, y agrégale el perejil. Licualo muy bien, hasta que quede suave. Si la quieres fría, ponla en un baño maría invertido (en vez de agua caliente, agua con hielo). Acá, la tomamos caliente y Rodrigo le puso crutones. Exquisita!!!

19 octubre, 2010

Babba Ganoushj

Una de las partes más entretenidas para cocinar es el aperitivo. Muchas veces reemplazo una comida por pequeños platos. Entre mis favoritos está el hummus, pistachos y frutos secos, quesos, uvas y la receta que hoy les presento: Babba Ganoushj; una pasta de berenjena tradicional de medio oriente, que se luce mejor si se come con pan pita.
Averiguando un poco de la receta encontré que, como muchas cosas buenas, hay que comerlo con prudencia porque según la tradición popular y moralista, es un plato ''dulce y seductor'' y las mujeres que lo comen seguido adquirirán las mismas características...Yo, lo como por lo menos una vez a la semana.
Babba Ganoushj
2 berenjenas medianas
1 diente de ajo grande, sin la vena y picado fino
2 cdtas. de comino molido
jugo de 1 limón
5 cdas. de aceite de oliva
sal y pimienta fresca
1/4 taza de perejil picado fino
Precalienta el horno. Pincha tus berenjenas con un tenedor por todos lados, sin piedad. Mete las berenjenas al horno caliente por 25 minutos o hasta que estén blandas al tacto y con la cáscara quemada por fuera.
Cuando estén frías, córtalas por la mitad, raspa la comida y reserva la cáscara de una berenjena. En una tabla de cocina pica todo el raspado; agrega el ajo, comino, sal, pimienta y perejil. Lleva todo al recipiente donde lo vas a servor o guardar y agrega el aceite de oliva.
También se puede hacer en la minipimer, pero yo lo prefiero con pedazos gruesos de berenjena.

23 agosto, 2010

Ají de Gallina

El último mes cambié el calor gringo por el frío chileno y las ensaladas hipocalóricas por los guisos y platos calentitos que mejoran el ánimo y empeoran el cuerpo. Un plato calentito, rico, rico y bueno para compartir es el peruanísimo ají de gallina. Lo hice para el cumpleaños de mi mamá, lo serví en pocillos chicos individuales como parte del aperitivo caliente. Si lo quieres de plato de fondo, se luce mejor acompañado de arroz blanco, papas cocidas, un tercio de huevo duro y una que otra aceituna. 8 personas

  • 3 pechugas de pollo enteras, cocidas y desmenuzadas. Guarde el caldo de cocción, para una sopita y para este ají de gallina.
  • 5 ajíes verdes
  • 1 lata chica de pimentones en conserva
  • 2 dientes de ajo picados finos (Nada de que yo no como ajo...)
  • 3 cebollas medianas picadas finas
  • 4 rebanadas de pan de molde, sin corteza y remojadas en leche (en su defecto, su hallulla)
  • 150 grs. de queso parmesano rallado. Ojalá, recién rallado.
  • 1 tarro de leche evaporada
  • 100 grs. de nueces picadas (no molidas, picadas para que se sientan)
  • huevos duros
  • aceitunas
  • aceite
  • sal y pimienta
  • orégano

Poner los ajíes a cocinar en una olla con agua hasta que estén blandos, más o menos 20 minutos. Una vez listos, sacarles la piel y moler en la juguera hasta hacerlos puré. Si no lo quieren tan picante, preocúpense de despeparlos. Reservar.

Hacer puré los pimentones en tarro. Reservar.

Moler el pan con la leche, y pasar por un colador (no quieren encontrarse con un pedazo de pan entre sus pollos)

En un sartén poner tres cucharadas de aceite, llevar a fuego medio y sofreír el ajo con la cebolla hasta que esté transparente. Agregar el puré de ají y el puré de pimentón. Cocinar, revolviendo durante 10 a 15 minutos apróximadamente. Salpimentar, agregarle el orégano y sacar del fuego.

Poner todo el menjunje en la licuadora y agregar el pan remojado. Licuar hasta formar una salsa homogénea, si está muy espesa, soltar con un poco del caldo de pollo reservado.

Ahora la parte entretenida...Poner la salsa en una olla, agregar el pollo desmenuzado, el queso parmesano, las nueces y llevar a fuego medio hasta espesar. Revuelva sino quiere que se le pegue en el fondo de la olla. Cuando su instinto cocinero le diga que ya está ok; abra la lata de leche evaporada, viertala en la olla, revuelva y cocine por más o menos 10 minutos más o hasta que esté caliente de nuevo.

Listo!!!

Mejor todavía si se acompana con arroz blanco, papas cocidas, un cuarto de huevo duro y aceitunas.

06 julio, 2010

Visitas!

La llegada del verano trajo además de mucho calor, humedad y lluvia (sí, la lluvia es un fenómeno de todo el año por acá); dos visitas que nos dejaron felices y al día con lo que pasa en Chile. No es que no tengamos televisión, ni leamos el diario on line o no hablemos con la familia y los amigos; sino al día de detalles cotidianos; quién se casa, cómo fue el post terremoto, etc. Básicamente, de todo lo que se pierde estando lejos.
Obviamente, teníamos hartos planes para los turistas; museos, tiendas de ropa, acuarios enormes, coca cola, más tiendas de ropa, hamburguesas y chicken wings, etc… Pero como lo más importante para nosotros era hacerlos sentir “como en casa” a los que amorosamente acomodaron sus planes para acompañarnos unos días, les planeamos a cada uno un menú de bienvenida según los gustos que sabíamos traían.
La primera visita, mi hermana más chica, nos íbamos a la segura con tacos mexicanos, sangría hecha en casa y de postre el brownie que ya conocen. A la segunda visita, un muy buen amigo; un aperitivo de lo más mediterráneo, con Babba Ghannouj (pasta de berenjenas), queso de cabra al horno con salsa de tomates, hummus de garbanzos y para tomar, vino tinto y piscolas con el pisco que él traía (bienvenido sea!). De postre, un nada mediterráneo Carrot Cake con frosting de cream chesee o mejor dicho, queque de zanahoria con una pastita dulce de queso crema que dan ganas de comérsela con el dedo.
Acá va la receta del queque de zanahoria y un gran abrazo para la Josefina y Ramón
. Queque de zanahoria o Carrot Cake
Ingredientes
margarina, 150 gr
azúcar, 2 tazas harina, 2 tazas huevos, 3 polvos de hornear, 1 cdta. bicarbonato, 2 cdtas. canela, 2 cdtas. estracto de vainilla, 1 cdta. nueces picadas, 1 taza zanahoria rallada, 3 tazas jugo de una naranja ron, 4 cdas. coco, 1/2 taza (opcional)

Preparación:

  1. Precalentar el horno a temperatura media. Enmantequillar y enharinar un molde rectangular.
  2. Batir la mantequilla con el azúcar, cuando esté la mezcla homogénea agregar los huevos, aternando con los ingredientes secos cernidos.
  3. Seguir batiendo y agregar el jugo de naranja y la zanahoria rallada.
  4. Mezclar las nueces picadas con una cucharada de harina (para que no se vayan a fondo del molde) y agregar a la mezcla.
  5. Al final, agregar la vainilla, el ron y el coco.
  6. Llenar el molde hasta la mitad (sube mucho) y llevarlo al horno precalentado por 1 1/4 hora o cuando al enterrar un palito en el medio, este salga seco.

10 junio, 2010

Festivales, paseos y más

Ya empezó el verano en Estados Unidos, con bastante furia según mi escasa experiencia con climas húmedos-lluviosos. Sin embargo, y a pesar de lo desesperante que puede ser no encontrar un lugar donde estar sin “atontarse” por las altas temperaturas –a excepción de los mall y supermercados que más vale ir con un chalequito si no quieres sufrir las consecuencias del aire acondicionado- el verano saca el mejor espíritu festivo de los locales, y no perdonan fin de semana sin un festival de lo que sea. Es así como empezamos con el SweetWater Festival, auspiciado por una cerveza local del mismo nombre, el evento tuvo lugar en uno de los tantos parques que se pueden encontrar en la ciudad. Ahí comimos unos exquisitos tacos de pescado, probamos los distintos tipos de cerveza que ofrecía la marca y oímos buena música en vivo; extrañados de no encontrar algún borracho aguando la fiesta. Otro festival al que tuvimos la suerte de coincidir, fue el Food Festival en Savannah, una ciudad con una arquitectura victoriana en su centro histórico, que queda a más o menos cuatro horas en auto desde Atlanta y que fue la primera capital del Estado de Georgia y que además es sede de una de las escuelas de diseño y arquitectura más reconocida de Estados Unidos, el Savannah College of Art and Design. Todo esto le da una onda muy entretenida; con estudiantes que recorren la ciudad en bicicleta con sus planos, dibujos y cámaras de foto intentando obtener la mejor imagen de esta ciudad calificada como una de las más lindas del sur de Estados Unidos. Fueron los mismos estudiantes quienes organizaron el festival de comida donde se podían encontrar “ejemplares” de todos los continentes, desde Irán y un maravilloso arroz persa; Cuba y su cuban sándwich; India y sus curries, etc.… Digamos que no es muy difícil conseguir un puñado de diferentes nacionalidades en este país. Y así, suma y sigue festivales de arte, cervezas y música que hacen de estos fines de semana de calor un buen panorama. Pero como lo que me trae aquí es la cocina, hoy les propongo un aperitivo que comimos, no el festival de comida, pero sí en el Jazz´D Tapas Bar de Savannah, un bar en pleno centro histórico con toda la onda del sur; jazz, blues y buena comida. No es muy veraniego pero es tan rico que da lo mismo la época del año en que se coma. Acá lo hemos repetido un par de veces y queda tan bueno que no tiene nada que envidiarle al original. Requiere muy poco trabajo y un buen vino tinto para acompañarlo.
Antes de ir al horno

Listo para comer

Dip de queso de cabra y salsa de tomates

Queso de cabra sobre salsa de tomates, horneado hasta que forme una costra dorada y servido con rebanadas de pan baguette, ligeramente horneadas con mantequilla y cilantro.

Ingredientes

1 queso fresco de cabra, tiene textura de queso crema (En Chile, creo que el queso Noblesse de la marca Chevrita) 1 tarro de salsa de tomate preparada (esa que viene en frasco de vidrio). Rebanadas de pan baguette untadas en mantequilla y espolvoreadas con cilantro fresco picado fino, horneadas sólo hasta que la mantequilla se derrita.

Preparación

En una fuente chica que pueda ir al horno, poner abundante salsa de tomates y sobre ella el queso de cabra (aquí lo venden en forma de cilindro). Llevarlo al horno a temperatura media-alta, por 10 minutos o hasta que la salsa comience a burbujear ligeramente. Prender el grill, sin perderlo de vista porque ese proceso es muy rápido y depende mucho de cada horno. Esperar hasta que se forme una costra dorada en el queso. Sacar, esperar unos minutos y servir caliente con las rebanadas de baguette.

12 mayo, 2010

Bienvenido Otoño

Distintos hemisferios, distintas estaciones. Es por eso que decidí traer a la mesa un factor común del naciente otoño del hemisferio sur y de las últimas reminiscencias de invierno que quedan por acá arriba: la manzana. La manzana es, sino la más, una de las frutas más versátiles. Se me vienen a la cabeza el clásico de manzana, leche condensada y merengue al horno que he probado en muchas casas y que varía su preparación según la antigua receta familiar que se siga. Otros para recordar son la tarte tatin, crumble de manzana, strudel, los kuchenes en sus diferentes masas y las manzanas al horno con vino tinto. Ahora, otra virtud de esta fruta, es que queda particularmente buena si se come tibia o caliente contrastada con algún elemento frío o de frentón un helado. Este invierno en Estados Unidos ha sido especialmente frío y largo y, en un supremo esfuerzo por no llevar las calorías del postre directo a mis caderas, alargue lo que más pude la elaboración de mi postre tibio de manzanas para el final de la temporada que, supuestamente, ya llegó. Coincidió, premeditadamente, con que unos amigos chilenos vendrían a comer ese fin de semana…así las calorías no se irían sólo a mis caderas sino que también a la de los seis invitados. Esta versión de postre de manzana lleva poco tiempo de elaboración, se puede hacer antes y meter unos minutos al horno antes de servirlo para que esté tibio. Aunque en la foto no sale, lo acompañamos de una bola de helado de vainilla para contrastar las temperaturas.
Postre de manzanas con crocante de azúcar rubia
Ingredientes para la base:
2 tazas de harina
1/2 cucharadita de polvos de hornear
3/4 cucharadita de sal
100 gr. de mantequilla
1 taza de azúcar
1/4 taza de miel
2 huevos
1/2 taza de leche descremada
4 manzanas maduras, peladas y en gajos
Ingredientes para el crocante:
1/2 taza de azúcar rubia
1/2 taza de harina
1/2 taza de mantequilla fría en cubitos
1 cdta. de canela
nueces picadas
Preparación:
  1. Enmantequillar y enharinar un molde redondo de queque con fondo removible. Precalentar el horno a temperatura media.
  2. En un bol, mezclar la harina con los polvos de hornear y la sal. En un bol aparte, batir la mantequilla con el azúcar y la miel, agregar los huevos de a uno, batiendo durante cada adición.
  3. al batido de mantequilla y miel, agregar 1/2 taza de los ingredientes secos cernidos, luego la leche y terminar con el resto de los ingredientes secos. Poner en el molde y reservar.
  4. Sobre la masa que está en el molde, poner los gajos de manzana en forma de círculo.
  5. Hacer el crocante mezclando las azúcares con la harina, canela, nueces y mantequilla y con los dedos "pellizcar" la mezcla hasta formar migas gruesas. Espolvorear sobre las manzanas.
  6. Hornear 1 hora apróx. o hasta que al enterrar un palito en el centro, este salga seco.

14 abril, 2010

Marzo: Mes de Jamie Oliver

El viernes 09 de marzo el canal de televisión abc comenzó una serie de 6 capítulos llamada “Jamie Oliver´s Food Revolution”. Con un formato estilo reality show, el programa trata acerca de cómo el celebrity chef ayuda a transformar los hábitos alimenticios de la ciudad de Huntington, West Virginia, identificada como la ciudad menos saludable y con mayores índices de obesidad de Estados Unidos, por medio de las cocinas de los colegios y desde la propia comunidad.
En el cuarto capítulo, J.O se propone el desafío de enseñar a cocinar un plato saludable a mil personas en sólo cinco días, ya teniendo suficiente con tratar de reunir a esa enorme cantidad de personas, el cocinero se encuentra con un inesperado reto que amenaza el éxito de su ambiciosa meta; poner de su lado al conductor radial más oído de West Virginia quien ocupa su plataforma para boicotear la hazaña del intruso inglés.
A medida que avanza el capítulo, se ve como el sensible chef busca fieles en las calles, universidades y programas de televisión local. Sin embargo, tener en contra al conductor era una piedra en el zapato que impedía el triunfo de su objetivo, así que aplica la sicología para ponerlo de su lado y lleva a su enemigo a terreno, le muestra in situ testimonio de jóvenes de 15 o 16 años con proyecciones de vida menor a siete años por causa del sobrepeso; se reúnen con los dueños de una funeraria que les muestran cajones XXXL para los muertos obesos y que además sus familias tienen el deber de comprar dos espacios en el cementerio para enterrarlos como Dios manda. Finalmente, y resumiendo un poco el cuento, el malo se pone de parte del bueno y mil personas aprendieron a cocinar un plato saludable.
Cambiar los hábitos alimenticios de los estadounidenses no es tarea fácil, menos lo será para un celebrity chef que además es un inglés metido en territorio norteamericano. Sin embargo, sus ideas ya son bien recibidos por algunos, tanto es así que este año fue galardonado con el premio TED 2010, entregado por la fundación del mismo nombre (que debe sus siglas a Tecnología, Entretenimiento y Diseño respectivamente), sin fines de lucro dedicada a las “ideas que vale la pena difundir”. El premio consiste, además de 100 mil dólares para difundir su idea, en “un deseo para cambiar el mundo” con la colaboración de los miembros de la comunidad TED y con gran alcance a nivel nacional y mundial. El deseo de Oliver este año fue: “Deseo tu ayuda para crear un movimiento fuerte y sustentable para educar a cada niño acerca de la comida, inspirar a las familias a cocinar de nuevo y, empoderar a las personas de todo el mundo para pelear contra la obesidad”.
No piensen que el chef Jamie Oliver sólo cocina frutas, verduras y carnes blancas…no! Revisen su página y se encontrarán con cientos de platos y recetas exquisitas.
Su desafío no es hacer que el mundo sea habitado por personas flacas o ponernos en contra de las pizzas y de las hamburguesas, sino educar a la gente acerca de la composición de eso que eligimos comer, retomar la costumbre de cocinar en la casa de manera saludable y sabiendo que es lo que nos estamos llevando a la boca…y eso incluye esta fabulosa receta de brownie que saqué de su página web, aunque le hice algunas modificaciones para que se vayan a la segura con este postre que no falla.
Ingredientes:
1 taza + 2 cucharadas (sopa) de mantequilla sin sal
200 grs. de chocolate amargo, ideal al 70%
75 grs. de nueces picadas
3/4 taza de cacao en polvo tamizado
1/2 taza de harina
1 cucharadita (té) de polvos de hornear
1 3/4 taza de azúcar
3 huevos (ojalá orgánicos)
ralladura de naranja (opcional)
Preparación:
1. Precalentar el horno a 180°C. Enmantequillar, enharinar y cubrir el fondo de un molde cuadrado de 25 cm con papel mantequilla. Poner en un bol grande, el chocolate y la mantequilla y derretir a baño maría hasta que la mezcla esté suave. Agregar las nueces y sacar del baño maría.
2. En otro bol, mezclar el cacao, harina, polvos de hornear y el azúcar; agregar a la mezcla de chocolate, mantequilla y nueces. Quebrar los huevos y mezclarlos bien hasta obtener una consistencia sedosa.
3. Poner la mezcla sobre el molde y cocinar en el horno por 30 a 35 minutos. La consistencia del brownie es mojada, así que no se preocupen si sale aún húmedo por dentro, pero con una costra sólida encima.
4. Servir tibio con una bola de helado de vainilla. También queda buenísimo al otro día después de haber reposado en el refrigerador.

08 abril, 2010

www.valesapag.blogspot.com

Hace casi cuatro meses y recién casada, llegué a Atlanta, Estados Unidos, impulsados por el proyecto de trabajo de Rodrigo. De Santiago, me traje además de la ropa y el mejor recuerdo de la familia y los amigos, un par de libros de cocina que han sido aprovechados en exceso sobre todo en las primeras semanas de vida “gringa”. Estábamos solos, sin conocer a nadie todavía y veníamos también con un entrenamiento de fines de semana de salidas, comidas y pasarlo bien. El cambio de ambiente no nos frenaría, así que nos armábamos de ánimo, salíamos a comprar al supermercado y cocinábamos lo que se nos antojara ese día. Además, cualquier cosa "hecha en casa" sería más sana que lo que Atlanta nos estaba ofreciendo para comer.
Hoy día ya conocemos más gente y la excusa para cocinar es invitarlos a nuestro departamento o improvisar comidas para los dos, sin embargo, no ha sido suficiente. Así que buscando un motivo para cocinar y poder escribir sobre el tema desarrollé este blog donde pretendo entregar muchas recetas, experiencias, recomendaciones y reflexiones de lo que para mí significa la cocina.
Este blog es un encuentro deliberado entre la escritura y la comida que tiene como objetivo colaborar con el entusiasmo de quienes empiezan a aventurarse en el mundo de las recetas, proponer algunas nuevas y recuperar viejas prácticas culinarias que refuerzan la vida diaria. Se encontrarán en su mayoría, con recetas simples, ricas, con frutas y verduras de la estación, y casi siempre con ingredientes que hay en el refrigerador. Todas vendrán acompañadas de una foto que, espero con el tiempo, mejoren en calidad.
Les doy la bienvenida entonces a
http://www.valesapag.blogspot.com/, con la pretensión de llevar a sus mesas buenos y entretenidos momentos y a sus espíritus una ágil y entretenida lectura.

05 marzo, 2010

Ensalada de quínoa y hojas verdes

En Atlanta y en todo Estados Unidos existen los Farmers Market, un espacio abierto o techado donde los granjeros venden sus productos frescos, muchos orgánicos o cultivados de forma natural y producidos localmente. Al farmers market que vamos nosotros, llegan además frutas, verduras, especias y especialidades de otros estados y de varios países, es increíble y un panorama para los que somos buenos para cocinar...y para comer. Es el equivalente a las ferias libres de Chile pero con un trasfondo que defiende que los granjeros se mantengan en el negocio y una colaboración a la preservación de los recursos naturales.
En mi última ida al Dekalb Farmers Market compré un frasco de quínoa boliviana, motivada sobretodo por la buena reputación que mi hermana se encargó de darle antes de venirnos a vivir a Atlanta. Viniendo de ella, el grano este debe cumplir con características como pocas calorías, sabor y contundencia. Lo averigué y comprobé que media taza tiene 318 kcal y que con la misma media taza se puede alimentar fácilmente a seis personas si se mezcla con hojas verdes y otras enjundias. Así que resolví hacer la ensalada que quedó bien rica y es un plato por sí solo... Que disfruten!
Ingredientes:
  • 1/2 taza de quínoa
  • 1 zanahoria en cubos chicos
  • 1/2 zapallito italiano
  • 1/2 pimentón verde
  • 1/2 pimentón rojo
  • 1/4 taza de almendras peladas y láminadas
  • 1/4 taza de queso feta o queso fresco
  • 1 taza de rúcula
  • 1 taza de hojas de lechuga costinas, cortada en tiritas
  • 1 taza de hojas de espinaca, lo más nueva que puedan encontrar

  • Dressing
  • 2 cucharadas de mostaza
  • 3 cucharadas de aceto balsámico
  • 2 cucharadas de salsa de soja
  • 1 limón, su jugo
  • 2 cucharadas de miel
  • 3 cucharadas de aceite de oliva*
  • 1 cucharada de semillas de sésamo
  • 1 cucharada de alcaparras
  • sal y pimienta

Preparación:

1. En un colador lavar la quínoa bajo el chorro de agua fría y estilar. En una olla, poner los granos de quínoa, agregar media taza de agua y poner sal a gusto. Cocinar a fuego bajo, con la olla tapada hasta que se evapore todo el líquido. Traspasar a un bol y dejar enfriar.

2. En una ensaladera honda, mezclar la zanahoria, zapallo italiano, pimentones y hojas verdes y juntar con la quínoa.

3. Para el dressing: en una taza poner todos los ingredientes y revolver bien con una cuchara hasta tener una mezcla homogénea. Aliñar la ensalada y servir.

* Si no quieres ponerle aceite de oliva porque lamentablemente estás a dieta, el dressing queda igual de rico pero menos gracioso sin ella.